Sonoros saludos a tod@s!!!
Sin duda, mi querida Galicia se sitúa ya desde hace décadas -casi 3- en cabeza de las comunidades autónomas donde se produce una mayor dinámización de la industria audiovisual y cinematográfica, tanto desde el punto de vista productivo como económico. Guiándose siempre por la originalidad, creatividad y calidad de los contenidos, y creando al fin y al cabo lo más importante, una marca, un estilo totalmente reconocible.
Con el nacimiento de la TVG -Televisión Galega-, allá por 1985, se apostó acertadamente por crear y vertebrar un tejido audiovisual solido y fuerte, donde estuviesen involucradas plenamente las instituciones políticas, empresariales y educativas, para así en una estrategia común, poder afianzar, dinamizar y hacer evolucionar una «pequeña» industria audiovisual y cinematográfica de calidad. Permitiendo también, dentro de esa estrategia, la integración en el mundo laboral de los numerosos técnicos, productores, realizadores y directores salidos de sus prestigiosos centros de formación, tanto públicos como privados. Un modelo cuya implantación constituye una verdadera utopía en otras Comunidades Autónomas -hablo con conocimiento de causa-.
Desde su trabajo habitual en los -Estudios Cinemar films- de Santiago de Compostela Diego S. Staub ya se ha convertido en un nombre y un mezclador de re-grabación de plena referencia dentro del arte de la creación de sonido cinematográfico, tanto en la industria gallega como en la española. Fruto de ello son sus dos nominaciones en la categoría al mejor sonido, correspondientes a los próximos premios -Mestre Mateo- del Audiovisual Galego. Constituye también un claro ejemplo de las hornadas de técnicos profesionales audiovisuales y cinematográficos salidos de las prestigiosas escuelas gallegas que citábamos anteriormente y que contribuyen, desde su trabajo y buen hacer, a prestigiar un poco más la sólida industria audiovisual y cinematográfica gallega.
Para -LaBobinaSonora- es un placer trasladaos las impresiones y reflexiones de Diego S. Staub, al cual agradecemos de antemano su tiempo, predisposición y amabilidad hacia nosotros.
Comenzamos…..
LaBobinaSonora: Diego, provienes de la cantera de esa maravillosa escuela de imagen y sonido de A Coruña. ¿Cómo fue tu paso por ella?; ¿En qué momento decidiste que te dedicarías al arte del sonido para cine?
Diego S. Staub: Sabía desde siempre que quería dedicarme al sonido. Me crié entre altavoces y mesas de mezcla en la tienda de instrumentos musicales y sonido de mi padre. El cine apareció más tarde, después de dedicarme varios años a la postproducción para televisión y aún antes a la grabación musical.
Tuve la suerte de estudiar en la escuela de imagen y sonido de A Coruña, creo que en su mejor momento. Era la única escuela que existía en Galicia y una de las mejores del país, había mucha energía y ganas de dedicarnos a algo que aún estaba emergiendo.
En el año 95 la escuela y sus profesores enfocaban sus materias y prácticas más a la música. La postproducción audiovisual era algo que empezaba a nacer gracias a los medios digitales, “más asequibles”.
El primer Pro-tools y editor Sound Designer nos lo enseñó un profesor en la escuela, eso sí, a través de unas fotocopias. Como te podrás imaginar, era como ciencia -ficción para nosotros… tampoco fue hace tanto, pero todo evolucionó muy rápido.
LBS: ¿Cómo fueron tus primeros momentos de andadura profesional?, ¿Te marcó alguien especialmente?
DST: Ya de manera muy precoz empecé a investigar, a hacer mis propios amplificadores, mis altavoces y demás. Escuchar se convirtió en mi mayor afición. Recuerdo muchas noches, a altas horas, volvía al local donde tenías los amplificadores, ecualizadores y altavoces que construía … sólo para escuchar.
La escuela me dio una titulación y la oportunidad de trabajar en un estudio (Sodinor, en Vigo). Primero como técnico de grabación de doblajes, aún en bobina abierta de una pulgada y magnetoscopio UMatic. Al poco tiempo, ya con un primer Pro-Tools, empecé también a editar el sonido de series de televisión. Esa labor la hice durante años, para más de 250 capítulos. Estos años me dieron soltura y enseñaron sobre todo a trabajar el sonido con la imagen como elementos que se necesitan y complementan.
Mi inquietud por llegar más allá me llevó a buscar y preguntar mucho sobre el sonido para Cine. Tuve la suerte de a conocer a Amin de -Wildtrack- y sobre todo a Pelayo Gutiérrez de “La Bocina” que me abrió las puertas de su estudio para pasar con ellos una temporada. Estuve también en EXA, Cinearte y Soundtrack (Barcelona).
Yo seguía trabajando como editor para Televisión e incluso alguna TV Movie ya había montado y mezclado, pero después de esas experiencias ya sabía qué quería hacer…
En el año 2005, con Dolores Ben como gerente del estudio Sonidor en Vigo, iniciamos la construcción de Cinemar Films, en Santiago de Compostela, un punto más céntrico en Galicia y estratégico para el sector audiovisual. Se hizo pensando en satisfacer a un sector cinematográfico creciente en Galicia que necesitaba, hasta entonces, trasladarse a Madrid o Barcelona para realizar sus postproducciones de sonido para Cine.
Cinemar Films cuenta ahora con una sala de mezclas para Cine, una sala de grabación de efectos sala, salas de edición 5.1 y premezcla.
LBS: Tu área de trabajo, casi desde el comienzo de tu carrera, ha estado orientada hacia las labores de mezcla, en concreto la mezcla de re-grabación. Sin obviar también labores como mezclador de Foley y también algunos trabajos como editor de sonido: ¿ Tenías claro desde un principio que sería tu área de trabajo –la mezcla de re-grabación- ,o surgió ese interés de alguna otra forma o influencia?
DST: En Cinemar tenía claro que debíamos dar un paso más allá. Pienso que la especialización es un plus y una necesidad, sobre todo en los últimos tiempos donde parece que “todo vale” y los estándares de calidad han caído o desaparecido.
Sigo editando sonido y grabando Foley (labor que me gusta y valoro cada día más. Creo que muchas veces marca la diferencia sonora en una película), pero es en la mezcla donde siento que puedo aportar ese plus del que antes hablaba. Me encantan las jornadas de mezclas, y durante el tiempo que duran forman parte de mi día a día, casi no puedo dejar de pensar en la película y en su sonido.
LBS: Diego, dado que eres el primer mezclador de re-grabación que le realizamos una entrevista más dedicada y amplia, aclara a la gente: ¿En qué consiste exactamente la labor de un mezclador de Re-grabación y hasta donde llega sus atribuciones?
DST: La mezcla es conseguir el equilibrio, la coherencia, la forma. La mezcla es encontrarte con todos los elementos sonoros, sonido directo, efectos sala, ambientes, efectos, músicas… y darles la proporción necesaria para que, junto a la imagen, nos transmitan sentimientos y vayan por el mismo camino. Esto último es importante, vital. No entiendo y me despistan las mezclas donde el sonido se escapa de la pantalla. El 5.1 puede llegar a ser tan preciso como peligroso y es fácil que “abusando” de él nos separemos definitivamente de lo que sucede en imagen.
Una vez terminada la mezcla intento, en la medida de lo posible, hacer un seguimiento de los procesos posteriores, primera copia en 35mm, o DCP (Cine Digital), para ver (oír) que lo que suena es lo más parecido a lo que hicimos en mezclas. Desafortunadamente las salas de proyección son el límite y no hay dos que suenen igual.
LBS: ¿Cómo es habitualmente tu relación con el montador/diseñador de sonido cuando te enfrentas a una mezcla, te gusta estar informado desde el comienzo o ya entras en la etapa final de la post-producción?
DST: Si, me gusta mantenerme un contacto previo. A veces esa mezcla llega de manera inesperada y ya contactas cuando el montador/diseñador ha avanzado.
Lógico es visionar la película previamente para entenderla y quererla. La verdad es que es un gran momento para mí. Descubrirla… como abrir un regalo, vas quitando el papel que lo envuelve con una sonrisa inquieta.
El montador/diseñador está después todo el tiempo que dura la mezcla conmigo, es el que mejor sabe cómo está montadas las pistas y por qué están montadas así. Se instala en una mesa auxiliar, al lado de la consola de mezclas, y tiene acceso directo a todo el timeline con su montaje de pistas.
Hasta entonces es el que mejor conoce la película, seguramente ha estado varias semanas trabajando con ella, su opinión cuenta y mucho, por supuesto.
LBS: Trabajas en los estudios Cinemar Fims ubicados en Santiago de Compostela: ¿Qué equipamiento sueles utilizar generalmente, tanto software –plugins dinámica, procesado espacial etc-, como hardware –consola etc..- en Cinemar Films? ¿Y cuál es tu preferido?
DST: Trabajo en Cinemar, estudio que conozco desde su construcción. He sido el responsable además de la instalación de los equipos.
En la sala de mezcla cuento con una mesa de mezclas Icon de 48 canales y surround pannel. Un sistema de edición Protools HD3 PCIe, procesador TC6000, una serie amplia de Plugins.
En cuestión de plugins he ido aprendiendo con el tiempo que menos es más. Tiendo a usar el mínimo necesario para no estropear demasiado la señal. Si la toma microfónica es buena y la edición está a la altura pues hay mucho trabajo recorrido y el procesamiento necesario es menor.
Es en el sonido directo donde ha habido un salto cualitativo en los últimos años, los sistemas de grabación multipista a disco duro y los cada vez mejores micrófonos, incluidos los de corbata, han elevado de la calidad de la materia prima, la grabación de los diálogos, aumentado considerablemente la dinámica y reduciendo los niveles de ruido.
Así con todo, me gusta usar unos buenos ecualizadores para los diálogos, por ejemplo los Massenburg son claros en el uso y muy precisos, muy útiles además para eliminar algunos ruidos indeseados. Algún compresor multibanda de Waves para controlar la dinámica. Los compresores generales para los stems así como filtros paso alto y bajo para limitación de ancho de banda, por ejemplo los de Digidesign, necesitan poca potencia y son muy efectivos. En reverberaciones, la TC6000 tiene una amplitud y naturalidad especial. Pero uso también mucho la Altiverb y otras como la Revibe, no están mal los resultados después, eso sí, de ecualizarla bien.
Me gusta tener las sesiones bien ordenadas. Es imprescindible hoy en día con los tiempos tan reducidos que tenemos. Después de la mezcla, quedan por lo menos 4 ó 5 días de trabajo para hacer y entregar todos los “deliveries”: la Banda Internacional (M+E), las mezclas para TV, DVD, pasos de 24 a 25fps o viceversa y sus armonizados. Y cuando hablamos de 2 o más versiones como muchas veces hacemos (gallega, castellana e inglesa) los procesos se multiplican.
LBS: ¿Eres partidario de realizar muchas pre-mezclas anteriormente para llevar todo muy pulido o prefieres dejar margen en la sesión final de re-regrabación?
DST: Creo que la premezcla se ha usado y se usa simplemente como reducción de jornadas de mezcla (dinero) en una sala grande, es decir, una sala optimizada para ello. Si bien es cierto que existen estudios de edición y editores muy buenos y preparados para realizar buenas premezclas, me he encontrado muchas veces con otra películas supuestamente “premezcladas” que, a la hora de la verdad, no funcionan ya desde su montaje de sonido o edición de diálogos. Llegan a mezclas sin tiempo ni presupuesto para corregir lo que, considero, no está bien, y ya poco o nada se puede hacer.
Al ser la última parte de la cadena padecemos las limitaciones de falta de presupuesto (el poco que generalmente existía para sonido, ya se usó para múltiples contratiempos e imprevistos) y de tiempo, pues los retrasos se van acumulando, además, siempre aparece un festival a dónde la película va a participar y hay que llegar sí o sí…
LBS: ¿Cuál ha sido la mezcla de re-grabación más complicada que has afrontado hasta el momento, y por qué?
DST: Es difícil decirlo. Creo que son más complejas las que deben ser absolutamente naturalistas, por otro lado son las que más me gustan, pues suponen un reto. Aquellas donde cualquier efecto, sonido, que se salga de la pantalla va a ser antinatural.
Por concepto de película, por como se rodó y el resultado obtenido creo que –18 Comidas- de Jorge Coira tuvo una complejidad especial. Cuando ves (y escuchas) esa película no piensas nunca en el sonido, lo que escuchamos está ahí aunque nunca hubiera existido en el set de rodaje.
LBS: ¿Cómo suele ser tu relación con los directores durante las sesiones de mezcla de re-grabación, son dinámicos… o más bien no participan casi nada?
DST: Hay de todo.
Existen directores que se aburren mucho, no entienden qué estás haciendo escuchando una y otra vez unos diálogos, ambientes, fxs, ecualizándolos y demás. Se ponen nerviosos diciendo, “es que ahí falta tal cosa…” les digo: “ya, es que estoy sólo con los diálogos”… es cuando responden: “bueno, tú me avisas cuando esté, ¿vale?”.
Existen otros más dinámicos, que sí entienden y que aportan mucho. En ambos casos es importante transmitirles seguridad y sobre todo saber plasmar lo que muchas veces no saben explicar en “nuestro idioma”.
Nosotros decimos de manera automática “este diálogo tiene mucho brillo” pero un director posiblemente te dirá, “quiero que ese personaje esté en la habitación de al lado y que poco a poco se acerque a nuestra puerta”. La labor del mezclador es la de traducir sus palabras en reverberaciones, ecualizaciones, delays, etc y que, realmente, ese personaje esté en la habitación de al lado y se empiece a acercar.
LBS: Diego… ¿Cuál es el género con el que más disfrutas mezclando?
DST: Depende de la película. Como dije anteriormente, las películas naturalistas me gustan (ya como género) porque además son un reto sonoro. Aunque reconozco que alguna fantástica o de terror me apetece mucho volver a hacer, se experimenta más con el sonido como elemento narrativo fantástico en muchos casos y esa falta de naturalidad controlada te permite exceder en muchos casos ciertos “limites”. El “fuera de campo” es brutal, los impactos, fx, surround, colchones, subgraves, etc. El sonido como espectáculo.
LBS: ¿Crees necesario dominar o por lo menos haber pasado por las distintas categorías de una post-producción de sonido para afrontar con éxito una mezcla de re-grabación?
DST: Me parece fundamental. Creo que es imposible mezclar si nunca has montado sonido, por una cuestión estructural y de concepto. Es bueno haber editado diálogos alguna vez para montar mejor, etc.
Defiendo por otra banda la especialización de áreas, aunque todos sepamos de todo, el tiempo que uno dedica a mezclar, lo enriquece como mezclador y la experiencia, además aporta velocidad, decisión y seguridad y de eso también se trata.
Si el director de la película no está satisfecho es que, posiblemente, algo no has hecho bien o no has sabido interpretar.
LBS: Estas nominado por dos veces en los próximos premios del audiovisual gallego – premios Mestre Mateo-, por –Tralas luces- y Arrugas, ¿Qué nos puedes contar del mundo sonoro de cada una?
DST: Son dos proyectos absolutamente distintos y especiales.
-Tralas Luces- es un documental naturalista sobre la vida de una familia feriante que recorre el país con su pista de autos de choque.
Al ser documental el sonido directo no siempre es óptimo, por las condiciones reales de las localizaciones (fiestas de pueblo, autocaravanas, etc), la voz en off de la protagonista, que realmente son sus reflexiones, fueron grabadas en dichas localizaciones en momentos absolutamente diferentes a lo largo de 9 meses. Con ello quiero decir que hubo un trabajo de ajuste y limpieza de sonido directo importante así como después una construcción de ambientes, efectos y Foley que tenían que ser absolutamente naturalista.
-Arrugas- es otro trabajo especial, al ser animación la construcción sonora es total. Empezamos a trabajar ya desde la animática con la grabación de las voces en estudio, gran trabajo en el casting y dirección de actores de Charo Pena.
La propuesta sonora fue la de ser una vez más muy naturalistas en el diseño. De hecho, además de los ambientes de librería que usamos, se grabaron expresamente otros en una residencia de ancianos aquí de la ciudad, de eso se encargó Carlos García. También con el Foley, Miguel Barbosa, fue exigente al darle a cada personaje su personalidad, su ritmo.
LBS: ¿En que proyectos trabajas actualmente?
DST: Estoy terminando la mezcla de –Todo es silencio- de José Luis Cuerda. Película que también hemos sonorizado al completo en Cinemar. Tengo la suerte de contar con compañeros con los que trabajo muy cómodamente, como Miguel Barbosa, que se encargó del montaje de sonido y el Foley. Nos hemos apoyado en Javi Pato, como ayudante de montaje.
Trabajar con un director de la experiencia de José Luis es muy enriquecedor, es exigente porque tiene las ideas muy claras y es directo en sus aportaciones.
LBS: Por último, Diego. ¿Qué consejo darías a los que quieren dedicarse a este arte o están comenzando su carrera?
DST: Que paseen en la ciudad o en el campo y que escriban en un papel qué es lo que escuchan con los ojos cerrados…
LBS: Muchas gracias Diego y suerte para tus próximos proyectos, los cuales seguiremos muy atentamente.
oscardeavila@labobinasonora.net
Copyright © 2012 · Todos los derechos reservados; www.labobinasonora.net
La verdad que siempre es un placer leer una entrevista tan completa de alguien dedicado a este mundo sonoro, desde los inicios que con tanta atención leo y releo como de los últimos trabajos y reflexiones a lo largo de los proyectos.
Es la primera vez que veo en el blog mencionar la EQ de Massenburg y estoy totalmente de acuerdo con lo que comenta Diego, el plugin es de una precisión realmente útil.
Por cierto, no dejes de hacer nunca la última pregunta Óscar! Siempre se dicen cosas interesantes.
Una vez más gracias por currarte tanto este blog.
Un saludo
Los Massenburg siempre fetén, tanto en soft como en hardware, muy quirúrgicos y precisos pero también con caracter.
Esa última pregunta es siempre obligada, si!. Y como bién dices, Juán, no hay una respuesta igual, hay radica la esencia de la pregunta.
Espero seguir trayendo, poco a poco, a este humilde sitio a los magos, talentos y novatos del arte sonoro para cine español. Además de nuevas ideas que me surgan.
Gracias por tu apoyo Juán!!
Un afectuoso saludo